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Tarapacá: pescadores de caleta Riquelme buscan adaptarse al cambio climático

Agregar valor a su trabajo y sacar más partido a los recursos que capturan son dos de las opciones que barajan en caleta Riquelme, de Iquique.

Publicado: 03-feb-2021

Con el fin de hacer frente al cambio climático, la Corporación de Pescadores y Buzos Artesanales de Iquique participó en un proyecto enfocado en la obtención de herramientas para enfrentar el fenómeno.

La iniciativa consideró, por ejemplo, las opciones de agregar valor a su trabajo cotidiano y aprovechar de mejor forma los recursos que extraen.

En el programa, desarrollado en el marco del proyecto "Fortalecimiento de la Capacidad de Adaptación en el Sector Pesquero y Acuícola Chileno al Cambio Climático", conjugaron esfuerzos la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, el Ministerio del Medio Ambiente, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF).

Bonito y locate

Para sumar valor a sus productos -como bonito, locate y choro zapato- se diseñó una planta de procesamiento que podría instalarse en la caleta.

La idea es habilitarla al interior de un container y -opcionalmente- ampliarla de manera modular. Se contempla, además, asegurar el cumplimiento de las medidas sanitarias durante el procesamiento y manipulación de los productos.

"Pensamos en una idea que efectivamente pueda llevarse a cabo. Por eso el resultado fue una planta procesadora que, de manera simple, permita a los pescadores procesar sus productos, otorgarles valor y satisfacer la demanda de restaurantes locales, por ejemplo", afirmó Flavio Rodríguez, consultor del proyecto.

"Con esta alternativa, estimamos que al menos unas 10 o 15 familias puedan vivir de los ingresos generados gracias a esta planta, volviéndose un complemento importante a las actividades de extracción, cada vez más inestables debido a los efectos del cambio climático", añadió.

En el mismo marco, se llevaron a cabo talleres de capacitación con los pescadores, así como pruebas de desarrollo de productos y procesos a escala de prototipos, con modelos de negocios adaptados a la realidad de la caleta.

Lo anterior se detalló en manuales de proceso, que incluyen requerimientos técnicos, recetas y protocolos para el envasado y conservación en formato ahumado, congelado y empacados al vacío.

Así, se desarrollaron porciones de bonitos ahumados congelados, choros zapatos ahumados sellados al vacío y pebre de piure en frasco de vidrio, entre otros.

Estudios durante pesca de albacora

Un segundo ámbito de acción del proyecto apunta a aprovechar -desde el punto de vista comercial- la fauna acompañante, vale decir aquello que se captura junto a los recursos buscados específicamente por los pescadores.

Es el caso del tiburón azulejo y tiburón cola de zorro. Durante 12 meses, sus volúmenes de captura, tallas, frecuencia y abundancia fueron anotados en el marco de las operaciones pesqueras cotidianas sobre el pez espada o albacora.

"A partir de esa información realizamos una serie de actividades para diseñar nuevos productos en conjunto con los representantes de los pescadores, a través de talleres grupales y reuniones de trabajo individuales", detalló Leonardo Núñez, otro consultor.

De esa manera, se ideó la producción de filetes congelados de 200 gramos libres de piel y cartílago, para los cuales se identificaron las principales variables de producción, los rendimientos más eficientes y otras variables para el proceso de envasado y conservación.

También se buscó relevar su alto valor nutricional y su atractivo gastronómico.

Pescador: "Un paso importante"

Manuel Villalobos, presidente del Sindicato de Buzos Mariscadores Bahía Iquique manifestó la importancia de continuar con estas iniciativas: "Pensar nuestra actividad en un contexto como el actual implica adaptarnos, y estos proyectos podrían ser un paso importante."

En la misma línea, Brunetto Sciaraffia, director zonal de Pesca y Acuicultura, valoró el potencial de las propuestas: "Se trata de iniciativas que sin duda van a fortalecer la capacidad de los pescadores de la zona de adaptarse al nuevo contexto que impone el cambio climático, y que fueron diseñados anteponiendo sobre todo su factibilidad y su pertinencia territorial. Ambos cuentan con estudios de pre-factibilidad muy contundentes, que esperamos puedan contar con los apoyos necesarios para ponerlos en marcha".


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